Sé que hay algo macabro en esto pero me gusta leer los pésames de la gente en twitter porque te da una pista de cuanto admiraban o querían a la persona que acaba de morir.

Hay quién dedica una frase larga y quién se limita a:

“Ha muerto tal. Gran persona. Descanse en paz”

Y me parece bien lo de dar el pésame públicamente.

Creo que tiene más sentido decírselo a la familia pero porque creo que si alguien se me acerca en la cola del supermercado y me dice: “Siento mucho que haya muerto Steve Jobs”… me quedaré raro.

Y sé que el dar el pésame públicamente no es más que una manera de querer llegar a los familiares.

A los familiares a los que el muerto les importaba poco, claro.

Porque si cuando muere alguien a quién quieres, entras en twitter a ver cuanta gente le da el pésame… eres raro de cojones.

Pero lo que me divierte de leer los pésames no es tanto el dar el pésame como el que a veces tengo la sensación de que dar el pésame en twitter se convierte en una competición de:

“Veamos quién suelta la frase más bonita”

Y eso es divertido porque va a morir mucha gente y tendremos que dar el tuitpésame muchas veces lo que significa que más nos vale tener un surtido de frases bonitas con las que impresionar porque sino, se nos verá el plumero.

Está claro que si damos el pésame por twitter, también querremos saber cuantos retweets hemos tenido.

Y cuantos más, mejor.

Son las reglas de twitter.

Y me extraña que nadie haya dado el pésame y al terminar haya puesto un:

“(…) RT si te ha emocionado”

Antes de que existiese twitter estoy convencido de que enterarse de la muerte de algunas personas se limitaba a un:

“¡Hostia! ¿se ha muerto este/a?”

En algunos casos incluso:

“¡Hostia! ¿Pero este/a no estaba ya muerto?”

Y seguías con lo tuyo.

Pero en twitter no puedes poner eso.

No puedes poner:

“Pues yo pensaba que ya había muerto hacía tiempo. RT si tú también”

Y menos si eres un personaje público.

Porque tienes que quedar bien.

Así que hay que emocionar.

Y me gusta imaginarlo como una competición porque me gusta creer que hay gente sentada frente al ordenador que al leer el tweet de alguien dando el pésame… se enfada.

Se enfada en plan:

– ¡¡Hijo de puta!! ¡¡Que bonito ha sido eso!! Está claro que ahora no puedo poner lo de “al menos en el cielo hoy sonreirán con su llegada” porque es menos bonito que lo que ha puesto este hijo de puta –

Pero es divertido.

Sobretodo porque cuando muere un familiar nuestro no tenemos frases tan bonitas, coño.

Cuando murió mi abuelo me limité a un:

– Que putada –

Pero no pensé si el cielo se alegraría con su llegada ni si los lápices de su mesilla habrían llorado por las palabras que ya nunca escribirían.

Pero igual eso solo me pasa a mi.

Lo importante es que hay que ir pensando ya en lo siguiente.

Porque lo del pésame ya se está quedando antiguo.

Lo siguiente yo creo que será twittear tu última frase.

Lo siguiente será aprovechar tu último suspiro para decir:

– Dame el móvil. Quiero twittear que me muero en dos segundos –

Y los que estén junto a él pensarán:

– ¿En serio va a twittear en lugar de mirarnos a los ojos y cogerme de la mano? ¿En serio quiere más a esa gente que no conoce de nada? –

Y saldrán de la habitación.

Y el tipo morirá solo.

Bueno…

Solo no.

Abrazado a su teléfono y contando cuantos RT tiene su último suspiro.